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jueves, 20 de febrero de 2014

Por si había alguna duda...

Sobre el absoluto centralismo sevillano.

Golpe al aparato sevillano
El 'gran poder' sevillano se conmociona. No sólo el aparato de la calle San Fernando, donde tiene su cede el PP-A. Al 'stablishment', el 'poder fáctico', a 'la créme de la créme' hispalense aún le dura la cara de asombro tras conocer que el elegido es alguien a quien no conocen. Un malagueño, (...)
(...) Sevilla se ha apoderado de la centralidad del partido, (...)
 La procedencia malagueña de Moreno Bonilla (...) convulsiona. Quizá porque coincide con el acceso de otros malagueños a puestos de rango andaluz, como Javier González de Lara a la presidencia de la Confederación de Empresarios o de José Sánchez Maldonado a la consejería de Economía. En los salones de la ciudad de la Giralda se percibe, o se teme, el ocaso de la vieja metrópoli frente a la pujanza de la ciudad cosmopolita, abierta al mar, al turismo y a la innovación. El eje del poder se desplaza, el centro único se difumina y los hechos lo demuestran.
 (...)
Diario Sur// 12.02.2014 


"Tiene que empezar a verse normal que se pueda presidir una entidad pública o privada andaluza sin ser de Sevilla"
"Eso no es dramático. Es ver con naturalidad que Almería o Huelva existen"
Javier Gónzalez de Lara. Recién nombrado Presidente de la patronal andaluza y de la CEM.


La inercia inútil del centralismo.
Ha llegado a parecer que en la patronal andaluza era requisito pertenecer al cogollito hispalense.

(...) ya debería ser normal ver nombres en los puestos de mando de la región sin ser de Sevilla . La frase, en sí misma, ya delata la anomalía andaluza. Eso, en la organización española, sonaría no ya aldeano sino ridículamente inverosímil: (...) En Andalucía, desde que se creó la Junta, se han encadenado tres presidentes sevillanos; hasta llegar a parecer, como apunta González de Lara, que era un requisito pertenecer al cogollito hispalense. 
(...) la capital se establecería en Sevilla y se impondría un centralismo patológico, un agujero negro capaz de absorber todo, también la patronal, y tras el mandato fundacional se han encadenado capos sevillanos, Otero Luna, "Lele" Álvarez Colunga con la impronta del señorito, y Santiago Herrero. En ese tiempo, la patronal andaluza se ha envenenado de fulanismo y de nepotismo, opacidad, dependencia de la teta pública hasta el escándalo de los cursos de formación como los sindicatos, y además esa "sevillización". 
Andalucía, tres décadas después, tiene muchas razones para la decepción. (...) el centralismo inoperante ha contribuido a la pérdida de confianza colectiva. No se ha superado el modelo sevillita llevado al paroxismo por Pepote. (...) 

Teodoro León Gross
Diario Sur (27.01.2014)