Sin Escalas.
La obra fue inaugurada el fin de semana pasado con bombo, platillo y boato. No es para menos. Tras una inversión de 240 millones de euros, con fondos procedentes de la Unión Europea y del -Banco Europeo de Inversión, se abrieron las exclusas que permitirán que barcos de gran calado puedan remontar el Guadalquivir y llegar hasta la capital andaluza.
En la inauguración, el alcalde de Sevilla celebró que los turistas de cruceros podrán atracar casi al pie de la Torre del Oro sin tener que pasar por escalas engorrosas. "Hasta ahora teníamos el problema de que los turistas que querían venir a Sevilla tenían que desembarcar en Málaga", dijo el inefable monteseirín.
Hace tiempo que las tonterías que dice el alcalde de la capital autonómica han dejado de ser un problema. El problema comienza cuando quiernes deben decidir el destino y el curso de las inversiones parecen razonar con los mismos parámetros que un alcalde de luces cortas.
Marbella lleva años reclamando una base para cruceros en su litoral, pero ni la ampliciaón de Banús -congelada hace años- ni la La Bajadilla, cuyo proyecto se ha quedado a medio camino, permiten esta posibilidad. Contar con el destino turístico más consolidado de Andalucía, la marca más conocida, la mayor concentración de hoteles de cinco estrellas de España y 27 kilómetros de costa no son credenciales suficientes. Aún para quienes se resisten a entrar en la guerra de agravios localistas resulta muy difícil no terminar reconociendo que todos los caminos inversores acaban siempre conduciendo al mismo lugar: Sin escalas engorrosas.
Diario Sur
Héctor Barbotta. -La Totonda-
(24-10-09)
La obra fue inaugurada el fin de semana pasado con bombo, platillo y boato. No es para menos. Tras una inversión de 240 millones de euros, con fondos procedentes de la Unión Europea y del -Banco Europeo de Inversión, se abrieron las exclusas que permitirán que barcos de gran calado puedan remontar el Guadalquivir y llegar hasta la capital andaluza.
En la inauguración, el alcalde de Sevilla celebró que los turistas de cruceros podrán atracar casi al pie de la Torre del Oro sin tener que pasar por escalas engorrosas. "Hasta ahora teníamos el problema de que los turistas que querían venir a Sevilla tenían que desembarcar en Málaga", dijo el inefable monteseirín.
Hace tiempo que las tonterías que dice el alcalde de la capital autonómica han dejado de ser un problema. El problema comienza cuando quiernes deben decidir el destino y el curso de las inversiones parecen razonar con los mismos parámetros que un alcalde de luces cortas.
Marbella lleva años reclamando una base para cruceros en su litoral, pero ni la ampliciaón de Banús -congelada hace años- ni la La Bajadilla, cuyo proyecto se ha quedado a medio camino, permiten esta posibilidad. Contar con el destino turístico más consolidado de Andalucía, la marca más conocida, la mayor concentración de hoteles de cinco estrellas de España y 27 kilómetros de costa no son credenciales suficientes. Aún para quienes se resisten a entrar en la guerra de agravios localistas resulta muy difícil no terminar reconociendo que todos los caminos inversores acaban siempre conduciendo al mismo lugar: Sin escalas engorrosas.
Diario Sur
Héctor Barbotta. -La Totonda-
(24-10-09)
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