Primero fue el agua.

Manuel Becerra.

El traspaso a la Junta de las competencias sobre chiringuitos y otras actividades en las playas me preocupa, y no por el estado de las arcas de los gobiernos central y autonómico, que es casi igual de desastroso, sino por la experiencia de las políticas hidráulicas en Málaga. La cesión a Andalucía de la Confederación del Sur provocó no solo que ese órgano fuera absorbido por Sevilla, sin que ni se invirtiera ni planificarán actuaciones de enjundia para mejorar la garantía de abastecimiento en la provincia.
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Sin embargo, del mismo modo que la Junta no ha sido capaz tampoco de garantizar el saneamiento integral, todo apunta a que habrá que bregar, y mucho, para que estas nuevas competencias de playas se gestionen teniendo en cuenta su vital importancia para Málaga.

Diario Sur
30.03.2011